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Archivo:Quita-tu-apestosa-mano-de-mí-maldito-humano.ogg ¡Quita tu apestosa mano de mí, maldito humano!
~ Attar se encuentra con Leo Davidson

El Coronel Attar (conocido simplemente como Attar) es el antagonista secundario de la nueva versión de Tim Burton de 2001 de El Planeta de los Simios.

Es el comandante del Ejército Simio y solía ser la mano derecha y amigo del General Thade.

Personalidad[]

Attar era el leal teniente y mejor amigo del general Thade, y disfrutaba de la emoción de cazar humanos. También compartía la aversión de Thade por ellos. Sin embargo, una diferencia clave era que él era un devoto seguidor de la religión de los simios, basada en la adoración del primer simio, Semos. Attar lo demostró cuando exigió que todos inclinaran la cabeza antes de la cena para rezarle. Incluso montó en cólera después de que Leo prendiera fuego deliberadamente a la tienda donde Attar guardaba su santuario personal a Semos.

Antes era el mejor alumno de Krull, el anciano general gorila del ejército de simios, y por eso se respetaban mutuamente. Sin embargo, cuando Thade se convirtió en general al derrotar a Krull, ambos comenzaron a detestarse, hasta el punto de que Attar lo mató durante la batalla final.

Aunque confiaba profundamente en Thade, vio con horror cómo este marcaba la mano de Ari como si fuera una esclava humana. Al final de la película, se redime al descubrir la verdad sobre Semos. Después, se sintió traicionado al descubrir que todo lo que creía era mentira y juró no volver a confiar ni ayudar a Thade.

Al observar cómo humanos y simios enterraban a sus soldados caídos, incluyendo el cadáver de su antiguo mentor y amigo Krull, Attar, en señal de arrepentimiento, ordenó que las tumbas no fueran marcadas para ocultar la distinción entre simios y humanos, y así ambos serían llorados juntos para siempre.

Apariencia[]

Era un gran gorila occidental de tierras bajas, con pelaje marrón rojizo oscuro y piel muy oscura.

Su vestimenta consistía en una armadura de metal negro brillante, a veces complementada por un casco negro con una parte superior redondeada similar a la concha de un caracol.

Biografía[]

Primeros años de vida[]

No se sabe mucho sobre Attar, pero se sabe que es descendiente de los simios modificados que llegaron al planeta Ashlar cuando la nave espacial Oberon se estrelló allí.

De joven, se unió al ejército de simios, donde conoció a Krull, el anciano general gorila, y a Thade, hijo de Zaius, uno de los ancianos del senado y descendiente directo de Semos. Ambos se hicieron amigos, y él se convirtió en el mejor alumno de Krull hasta que un día Thade lo derrotó en combate y se convirtió en el nuevo general del ejército.

A partir de entonces, Attar fue nombrado coronel del ejército y mano derecha de Thade, acompañándolo en muchas de sus cacerías humanas.

El Planeta de los Simios (2001)[]

Attar aparece por primera vez en la partida de caza en la jungla, donde cazaban a una tribu de humanos que saqueaban los huertos. Allí se topó con Leo y lo arrojo lejos de un solo golpe. Más tarde se topó con el General Thade, quien se molestó porque Leo lo miraba fijamente. Cuando Leo agarró la pierna de Attar, este se enfureció y lo pateó diciendo: "¡Quita tu apestosa mano de mí, maldito humano!".

Llega al mercado de esclavos de Limbo con Thade, su hermana y su sobrina para comprar una mascota humana para su cumpleaños. Allí, se da cuenta de que Leo también está encarcelado y le aconseja a Limbo que lo vigile, ya que lo considera agresivo.

Luego acompaña a Thade a la cena del senador Sandar, donde comienzan a hablar sobre el problema humano. Ari intenta convencerlos de que los humanos también pueden tener su propia cultura. Allí, se reúne con su antiguo mentor Krull, ahora sirviente, y ambos intercambian miradas de odio. Tras ver a Thade atacar a Leo, Ari abandona la cena, lo que provoca que Attar y Thade también se marchen.

Durante la noche, Leo escapó con un grupo de humanos que liberó de su cautiverio, por lo que todos los soldados se pusieron en alerta máxima para contener a los humanos rebeldes. Fue entonces cuando, para ganar tiempo y que los demás escaparan de la ciudad, Karubi, el padre de Daena y líder anciano de la tribu, se quedó para distraer a Attar y confrontarlo. Desafortunadamente, la fuerza del gran gorila fue demasiado para él y, por detrás, Thade lo asesinó. Después de eso, Attar informó al general que Ari los ayudó a escapar, por lo que Thade le ordenó buscarlos mientras él iba a pedirle al Senado que declarara la ley marcial para tener permiso para exterminar a todos los humanos.

A la mañana siguiente, Attar regresó para informar al general Thade que habían registrado toda la ciudad y, por desgracia, ya no estaban allí. Thade admitió haber subestimado a Leo y se dispuso a cazarlo personalmente, pero un sirviente de su padre moribundo le dijo que necesitaba verlo urgentemente. Así que le ordenó a Attar que alertara a los puestos de avanzada para que no dejaran pasar a los humanos. Tras darle las instrucciones, Thade, con gran confianza en Attar, le confesó a su coronel que, además de su padre, él era en quien más confiaba, y que no solo eran soldados, sino también amigos, y que confiaba plenamente en él. Motivado por las palabras del general Thade, el coronel Attar marchó con sus tropas para alertar a uno de los puestos de avanzada para que estuvieran preparados.

Por la tarde, el coronel Attar llegó a un puesto de avanzada donde vio a un soldado chimpancé y a un soldado gorila peleando, así que se bajo de su caballo y los separó bruscamente. Luego informó al gorila a cargo del campamento sobre los humanos rebeldes y los simios que los ayudaban. Al comandante le hizo gracia oír que unos simios ayudaban a los humanos, pero esto solo molestó al coronel, quien tomó el mando del campamento para que estuvieran preparados en caso de que Leo y su grupo llegaran.

Al caer la noche, Leo y su grupo robaron algunos caballos para cruzar el río. Mientras rezaba solo en su tienda, en su altar personal dedicado a Semos, Attar oyó una bengala y salió, solo para ver a los humanos intentando huir a caballo. En ese momento, vio a Leo quemar las tiendas, incluida la suya, con su altar, provocando la ira del Coronel Gorila, quien, en un ataque de ira, lanzó varias boleadoras al caballo de Leo, haciéndolo caer. Intentó atraparlo, pero antes de que pudiera, vio a Krull entre los rebeldes. Ambos intercambiaron una mirada de odio al ver que maestro y alumno estaban en bandos opuestos, lo que permitió a los rebeldes escapar una vez más.

Esa misma noche, regresa a la ciudad humillado por la derrota y explica con dolor lo sucedido a Thade, lo que provoca un ataque de ira en el general chimpancé, que salta de un lado a otro, gruñendo como un loco y corta objetos con su espada hasta que sube a su caballo y finalmente se calma. Después, se disculpa con Attar, explicando que no está enojado con él, sino porque su padre, Zaius, acaba de fallecer. Por lo tanto, el coronel expresa sus sinceras condolencias, motivándolo a liderar el ejército, así que, más decidido que antes a matar a todos los humanos y a Leo, el general Thade ordena al coronel Attar que aliste a los batallones. De esa manera, Thade y Attar marchan con su ejército hacia Calima para acabar con todo de una vez por todas.

A la mañana siguiente, el general Thade y el coronel Attar finalmente llegan a las tierras de Calima, donde establecen su campamento militar para descansar y prepararse para la guerra.

Esa noche, dos visitantes llegaron al campamento. Cuando el coronel Attar exigió su identificación, uno se reveló como Krull. Aunque el coronel no estaba contento de ver a su antiguo mentor, la segunda visitante se reveló como Ari, quien exigió ver a Thade. Attar la dejó entrar a regañadientes y se quedó afuera, observando a Krull con odio para asegurarse de que no intentara ningun truco.

De repente, Attar oyó un ruido inquietante dentro de la tienda del general, así que entró rápidamente solo para observar, horrorizado, cómo Thade agarraba un hierro candente y marcaba sin piedad la mano de Ari con una marca que solo se daba a los esclavos humanos. El general Thade entonces le ordenó a Attar que la dejara ir para que pudiera morir con sus amigos al día siguiente. Aunque obedeció, Attar no aprobó lo que Thade hizo.

Curiosidades[]

  • Sylva, un personaje gorila de la película El Planeta de los Simios: Nuevo reino, tiene un pequeño parecido con Attar.
  • El nombre "Attar" es una palabra árabe que significa "perfume" o "aroma".
  • Attar pronuncia la cita "¡Quita tu apestosa mano de mí, maldito humano!" en homenaje a la memorable cita de George Taylor "¡Quitenme las patas hediondas de encima, malditos simios asquerosos!" durante la película original de 1968.
  • En la primera versión de la historia de William Broyles, el centurión amigo de Thade se llama «Baldar». Cuando Thade es coronado Emperador de Derkein, arresta a Baldar y planea casarse con Ari, la prometida de Baldar e hija del anterior Emperador. Baldar finalmente mata a Thade en venganza. En el primer borrador del guion de la película, el papel de Baldar se mantiene prácticamente inalterado.
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