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Proximus César es el principal antagonista de la película de acción y ciencia ficción de 2024 El Planeta de los Simios: Nuevo reino, la cuarta entrega de la franquicia de reinicio de El Planeta de los Simios.

Él es el rey tiránico de la Colonia de Simios Costeros, un clan rebelde de simios que proclaman seguir los caminos y enseñanzas del César original (pero de una manera tergiversada).

Personalidad[]

Proximus César es un monarca ambicioso y astuto, de modales sutiles y joviales, acompañado de un afán por mantener el control. Afirmando estar en contacto con las enseñanzas de César, demuestra ser un tirano arrogante y hipócrita que representa la hipocresía que contradice todas las creencias de César, como ser un manipulador carismático que distorsiona el legado de César como su propio futuro. Convierte el mantra de "monos unidos, fuertes" en uno que impone servidumbre a su voluntad. Proximus tampoco tiene reparos en amenazar la vida de otros simios, rompiendo así el juramento de César de "Simio no mata simio".

Aunque afirma que su deseo de reclamar el conocimiento y la tecnología humana era para el beneficio de sus compañeros, diciendo que es "[nuestro] momento", Proximus parece más intrigado por empoderarse aún más a sí mismo que por mejorar a otros simios, y finalmente revela su naturaleza controladora frente a los mismos simios esclavizados al vencer a Noa frente a ellos.

Por otro lado, Proximus admira a los humanos tras haber escuchado historias que exageran considerablemente sus "muchas maravillas"; como volar como águilas o hablar a gran distancia. Si bien le intrigan estos conceptos, creía erróneamente que no se puede confiar en ellos, y creía que si recuperarán sus armas volverían a encerrar a los simios en jaulas. Aunque tiene razón, esto solo atenúa aún más su hipocresía de esclavizar a los simios y solo querer su tecnología para su propio beneficio; por lo tanto, Proximus, en tales cosas, no es mejor que los desconfiados humanos en quienes cree bajo circunstancias paranoicas. Si bien no valora la vida humana (ni la de los simios), muestra aprecio e incluso entusiasmo por ciertos inventos humanos, especialmente armas como las de fuego.

Mostró un extraño afecto por Trevathan, su inventor humano esclavizado; aunque el hombre estaba atrapado, Proximus le proporcionó un alojamiento con agua corriente, más cómodo y espacioso que el permitido a la mayoría de sus simios. Proximus también expresa entusiasmo y gratitud hacia Trevathan cuando lee libros de texto, en particular de historia, que recibe la admiración del Rey simio, especialmente por la capacidad humana de conquista que pretende emular. Si bien Proximus parece apreciar a Trevathan, es más como si quisiera a una mascota, y carece de cualquier tipo de respeto. A pesar de tal afecto, el simio no mostró ninguna preocupación por la desaparición y muerte de su humano, pero es posible que ignorará la posibilidad de que estuviera muerto.

También parece sentir cierto interés por Noa, elogiándolo por ser un "simio brillante y útil" a su costa, en comparación con la mayoría de los simios que esclavizó, impresionado por cómo logró reparar una bara electrocutadora funcional por sí solo y por cómo logró entrar en la bóveda. A pesar de esto, aunque parezca más condicional, para él, Noa solo era el peón perfecto para su beneficio y se sintió decepcionado por su ingenuidad al confiar en los humanos, llegando incluso a golpearlo furiosamente por "destruir su reino".

Incluso con su reino en ruinas, Proximus seguía siendo lo suficientemente intimidante como para impedir que el Clan Águila ayudara a Noa en la pelea; Proximus demostró sed de venganza y mucho sadismo al golpear a Noa. Cuando Noa comenzó su canción para invocar a las águilas, Proximus, aún confiado y arrogante, simplemente le pareció muy divertido, aunque se enfureció cuando todo el clan comenzó a cantar. En sus últimos momentos, Proximus mostró más incredulidad que miedo cuando el ataque de las águilas lo hizo retroceder, y estaba demasiado conmocionado como para registrar su caída hacia la muerte, hasta la mitad del camino, momento en el que gritó de ira y terror.

En definitiva, Proximus no tiene ningún rasgo redimible ni admirable, pues no es más que un tirano despiadado que busca dominar tanto a los simios como a la humanidad. Además, es un hipócrita descarado que no cree que deba ser tratado con los mismos estándares que los demás.

Apariencia[]

Proximus César es un bonobo musculoso de mediana edad que suele vestir atuendos monárquicos de temática romana. Su atuendo consiste en una corona de bronce, una capa roja con hombreras naranjas/marrones sujetas con fragmentos de chatarra, brazaletes dorados y ropa interior naranja rojiza.

Biografía[]

Primeros años de vida[]

Proximus César nació 300 años después de la muerte de César y con el tiempo se convirtió en el líder de un grupo de simios que vivían en la costa. Idolatraba al famoso César y se consideraba su representante. Le fascinaba la tecnología humana y aspiraba a mejorar su clan. Desafortunadamente, distorsionó los principios de César para su propio beneficio, con el objetivo de conquistar otros grupos de simios, eliminar a sus líderes y absorber a los supervivientes en su propio clan como esclavos para aumentar su poder.

Además, aparte de ordenar a sus leales seguidores que llevaran a cabo ataques contra otros clanes de simios, también les ordenó que rastrearan a humanos, sin importar si eran salvajes o no. En una ocasión específica, que sus leales lograron atrapar a un humano llamado Trevathan, quien más tarde se convirtió en su inventor y educó a Proximus sobre la historia humana, específicamente la Antigua Roma. Con la intención de desbloquear una antigua bóveda militar y obtener entrada, también planeó y ejecutó una brutal masacre en un grupo de humanos que estaban en una expedición para localizar la bóveda y recuperar una clave de descifrado para restablecer la comunicación con otros asentamientos humanos. Después de este horrible evento, solo una joven llamada Mae sobrevivió. Al enterarse de su supervivencia, ordenó a sus seguidores que capturaran a Mae, con la esperanza de usarla para acceder a las armas almacenadas dentro de la bóveda.

El Planeta de los Simios: Nuevo reino[]

Proximus César ordenó a sus leales seguidores, Sylva y Lightning, junto con otros miembros de su clan, que incendiaran la aldea cercana llamada el Clan Águila. Saquearon la aldea entera, secuestraron a sus habitantes y, en medio de una batalla entre Sylva y Noa, hijo de Koro, asesinan a su líder, Koro. Tras esto, los partidarios de Proximus lanzaron un asalto a la aldea donde residía Raka, uno de los pocos ancianos que aún creían en el legado de César.

Tras el descubrimiento y captura de Noa y Mae por Sylva y Lightning, mientras Raka aparentemente moría en un río turbulento, son llevados al reino donde Proximus César supervisa su llegada y aparece. Cantando su himno habitual y motivando a sus súbditos, convence a algunos de intentar abrir la puerta de la bóveda con explosivos. A pesar de sus esfuerzos por inspirarlos, todos quedan derrotados, ya que las cadenas los matan o los hieren. Proximus, profundamente decepcionado, ordena a sus súbditos que se retiren, asegurándoles que mañana se harán más fuertes, y luego abandona su puesto. Más tarde, invita a Noa, Mae y Trevathan a una cena donde queda impresionado por el viaje del joven simio a su reino con Mae. Entonces comparte su deseo de evolucionar, convencido de que los humanos han logrado "muchas cosas maravillosas", como volar como águilas o comunicarse a través de los océanos.

Proximus acosa entonces a Mae por su mapa que lleva a su reino, afirmando que la bóveda ya le pertenece, y luego le informa a Noa que está al servicio de simios como él, que quieren saber cómo entrar en ella. Cuando Noa responde que no sabe cómo, ya que Mae nunca se lo dijo, golpea la mesa furioso antes de enfocar su atención en Noa. Le pregunta qué ve, y Noa responde que son "clanes secuestrados", pero Proximus le dice que son parte de su "reino", justificando que es para ellos y que nunca se debe confiar en los humanos. Afirmando que Mae ha venido a restaurar el papel dominante de la humanidad, Proximus le declara a Noa su intención de destruir a los humanos restantes antes de que vengan a por él y su reino y los enjaulen de nuevo.

Por la mañana, Proximus Caesar se enfrenta a Noa, Mae, Soona y Anaya tras abrir la puerta de la bóveda con Dar, la madre de Noa, cautiva. Quedó impresionado por su ingenioso plan para acceder a la bóveda y asombrado por los tanques militares. Aunque elogia a Noa por ser un "simio útil", lo regaña por no escuchar su consejo de no confiar nunca en un humano, encuentra su inocencia poco divertida y obliga a Lightning a tomar a Soona como rehén. Luego presiona a Noa para que decida entre humanos y simios, preparándose para hacerle daño a Soona basándose en la respuesta de Noa antes de desafiarlo provocativamente a atacar. Todo se detiene cuando Mae usa un arma que había tomado para rescatar a Soona disparándole a Lightning, mientras Proximus, cobardemente, la deja ir antes de preguntar por armas similares en la bóveda. A pesar de esto, Mae, ignorando las súplicas de Noa, provoca una explosión que destruye la presa. La reacción inicial de Proximus fue salvarse antes de ahogarse, empujando a otros simios en el proceso.

Tras perder su reino y a sus seguidores en el accidente, Proximus escapó milagrosamente de ser ahogado y llegó a la cima de la montaña con el Clan Águila. Después de que Noa se uniera a ellos, al llegar, comenzó a golpearlo brutalmente, furioso por haber destruido su reino. Soona, Dar y Anaya intentaron intervenir, pero Proximus les rugió para que se alejaran mientras seguía golpeando a Noa, dejándolos indefensos, solo para presenciar la brutalidad. Proximus se preparó para obligar a Noa a inclinarse antes de matarlo, con el clan obligado a presenciarlo. Noa, sin embargo, reunió la energía para cantar la canción del clan, lo que a Proximus le pareció divertido y pensó que Noa había perdido la cabeza. Para su sorpresa, Anaya, Dar, Soona y el clan se unieron, inquietando al chimpancé. Les ordenó que se callaran, pero lo ignoraron, y Águila del Sol, el águila del fallecido Koro, descendió en picado, arañándole la mejilla a Proximus y aterrizó en el brazo de Noa. Enfurecido, Proximus se preparó para atacar hasta que, bajo sus órdenes, las águilas del clan lo abrumaron, arañándolo y llevándolo al borde del precipicio. Proximus, rugiendo, miró a Noa, quien ordenó a Águila del Sol que asestara el golpe final, enviando a Proximus al borde del precipicio, haciéndolo caer al océano después de que las águilas detuvieran su ataque, poniendo fin a su reinado de terror y restaurando el legado del verdadero César.

Curiosidades[]

  • El nombre de Proximus es la palabra latina para "próximo/más cercano", lo que significa que su nombre es el "próximo César" cuando se traduce al inglés.
  • Kevin Durand reveló que Tony Robbins, Elon Musk y Arnold Schwarzenegger sirvieron de inspiración para Proximus César al improvisar su personaje: "Observé a oradores realmente carismáticos; vi bastante a Tony Robbins [el coach de vida], a Elon Musk y a Arnold Schwarzenegger haciendo discursos como los de un gobernador. Son personas que, sin proponérselo, simplemente hay que observarlas porque tienen mucho poder y carisma".
  • Su papel en la película recuerda mucho al del Dr. Zaius. Sin embargo, este último tenía varias virtudes, mientras que Proximus no tenía ninguna.
  • A pesar de ser descendiente de simios evolucionados, la esclerótica de Proximus César, la capa exterior de los ojos que rodea el iris, es de color oscuro; un rasgo que los simios normales tienen en la vida real.
  • Aunque es el antagonista principal, Proximus Caesar tiene menos tiempo en pantalla que Sylva, el antagonista secundario.
  • Es posible que Proximus sea descendiente de un miembro de la Colonia de Simios de San Francisco (la colonia de César), lo que podría explicar su conocimiento de César.
  • Proximus César es el segundo bonobo que aparece en una película de la franquicia El Planeta de los Simios, después de Koba.
  • En El Planeta de los Simios: Nuevo reino, no se muestra el cuerpo de Proximus César, por lo que no se sabe con certeza si murió o sobrevivió. Al final de los créditos, se escucha la respiración de un simio; podría haber sido Raka, el orangután mentor de Noa, quien supuestamente se ahogó al ser arrastrado por la corriente, o Proximus César y que ahora está planeando su venganza.
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